domingo, 28 de octubre de 2012

Wyoming y la peligrosa deriva antidemocrática

En mi vida siempre he huido de los extremismos, de las verdades absolutas, de las pasiones irracionales y en política he abominado los denominados "guerracivilismos", por contra, he desarrollado cierta curiosidad con aquellos que se ajustan a ese perfil y lo aplican contra mis ideas o las de mi partido.

Uno de ellos ha sido el Gran Wyoming, siempre lo he considerado una persona inteligente aunque bastante sectaria pero la última entrevista que he leído hace que me retracte sobre lo primero. El showman azote del Partido Popular declara en el Magazine Jot Down:  "Y tú me dices ¿qué pasa?¿Es que todos en el PP son malos? Sí, son sinvergüenzas, todo al que le dejas robar, roba; está en su naturaleza"

Los políticos hemos hecho muchas cosas mal (por algo somos el tercer problema para los españoles según el CIS), manzanas podridas hay en todos y la lucha contra la corrupción debe ser uno de nuestros principales objetivos, ¿pero considerar delincuentes a todos aquellos que pertenezcan a unas siglas?

Estamos ante unas declaraciones inaceptables, que señalan y acusan por el hecho de pertenecer o confiar en un partido político que por otro lado tiene el mayor número de afiliados y de votos a día de hoy. Esa forma de actuar no es muy distinta de aquellos fascismos contra los que se jacta de luchar, ¿verdad? . ¿Si fuera presidente nos haría cosernos algún tipo de distintivo en nuestras ropas?

Y no, no creo que esté exagerando, solo hay que leer la entrevista donde además de esta afirmación se dedica a poner en duda la legitimidad de las urnas, intentar argumentar el todo vale con tal de echar a aquellos con los que no comulgo, paradojas como criticar la guerra de Irak y afirmar que el pacifismo no vale para nada o afirmar que HB nunca han robado (el impuesto revolucionario no lo debe considerar delito)...

Sr Wyoming, no me parece transgresivo, rebelde, creo que es como aquellos críos que siempre están acostumbrados a salirse con la suya y no acepta el no por respuesta ni argumentación distinta a la suya y que son capaces de patalear y llorar tirandose al suelo con tal de conseguir lo que quiere en ese momento.

Por mi parte seguiré defendiendo la pluralidad ideológica, el debate, el sistema democrático y la importancia de los partidos políticos.

viernes, 5 de octubre de 2012

Juntos


Militantes del PSC impulsan un manifiesto por la autodeterminación


¿Se imaginan este titular cambiando el PSC por Partido Popular de Cataluña o del País Vasco? Seguro que la mayoría de las respuestas serían NO.

En los primeros pasos de mi aprendizaje político siempre consideré tanto a PP como a PSOE  dos partidos convencidos de la unidad de España, respetando la pluralidad de sus regiones y garantes del marco constitucional. Craso error, el discurrir de los años ha hecho que las voces de este partido en cada Región defiendan un concepto de Estado diferente o como ya escuchamos muchas voces "importantes" del PSC abogan directamente por la independencia.

Ante el adelanto de las elecciones por parte del gobierno CíU con la amenaza de realizar un referéndum sobre la independencia con el objetivo de tapar la incapacidad de su gobierno, parece que el Partido Popular se queda como el único de los dos "grandes" partidos que defiende que Cataluña es España, que los españoles admiramos y respetamos esta región y que la gran mayoría siente a sus ciudadanos como parte indispensable de nuestro país: Afrontando los problemas desde la unidad serán más fáciles de solucionar.

En un momento crítico como el actual se están adoptando medidas como centralizar compras y contrataciones, unificar organismos con competencias semejantes, fusionar administraciones, mancomunar servicios o eliminar barreras al mercado interior o exterior; los independentistas salen con que la solución a los problemas económicos está en el sentido contrario.

Si nos ceñimos a este debate, dejando de lado los supuestamente históricos, son múltiples los estudios de reputados economistas nacionales e internacionales que marcan la autodeterminación como un mayor problema en vez de una solución.

La gran masa de votantes del PSC ha sido la tradicionalmente situada en el llamado cinturón rojo de Barcelona, personas en su gran mayoría llegada de otras provincias de España. Me cuesta creer que aquellos que realizaron ese camino o sus descendientes renuncien a sus orígenes, tanto geográficos como sociales, por eso creo que es el momento que reflexionen ante esta situación límite con la que nos quieren enfrentar, si el partido en el que han estado depositando su confianza elección tras elección verdaderamente, en estos momentos, les representa.

Pese a los malos momentos tengo que decir que estoy muy orgulloso que el partido en el que milito , el Partido Popular, nunca haya dudado en la defensa de España y en su unidad como formula que conlleva mayor prosperidad para los ciudadanos que formamos este país.

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